GABRIEL CASILLAS* | PERSPECTIVA GLOBAL
El fin de semana antepasado se llevó a cabo en la ciudad de Nueva York la primera reunión semestral de 2015 del Comité Consultivo de Economistas (EAC por sus siglas en inglés) del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF), que es la asociación global de bancos e instituciones financieras del sector privado. El EAC –del cual tengo el honor de formar parte-, está formado por varios economistas en jefe de instituciones financieras del sector privado en todo el mundo y se reúne dos veces al año para discutir los temas económicos más relevantes a nivel global y regional. Este comité lo dirige Tim Adams, Presidente del IIF y ex funcionario del Departamento del Tesoro de EU y Charles Collyns, quien hasta hace unos años fuera el encargado de elaborar el documento “Panorama Económico Mundial” del Fondo Monetario Internacional (FMI) y ahora funge como economista en jefe del IIF
En esta ocasión, contamos con la destacada participación de Douglas Flint, Presidente del Consejo de HSBC Holdings, Larry Fink, Presidente del Consejo y CEO de BlackRock, Axel Weber, Presidente del Consejo de UBS AG, Daniel Tarullo, miembro de la Junta de Gobierno del Banco de la Reserva Federal (Fed), Olivier Blanchard, economista en jefe del FMI, Alan Blinder, profesor de la Universidad de Princeton y ex miembro de la Junta de Gobierno del Fed, Paul Romer, profesor de economía de la Universidad de Nueva York, Richard Clarida, economista en jefe de Pimco y Larry Lindsey, quien formó parte de la Junta de Gobierno del Fed y fue asesor económico del ex presidente de EU George W. Bush, entre otras personalidades. En mi opinión, los cuatro temas que definieron la agenda de discusiones fueron: (1) Lento crecimiento global; (2) divergencias de política económica; (3) regulación financiera; y (4) choque tecnológico y su impacto en las instituciones financieras. Definitivamente no son temas nuevos, pero me interesa comentarlos en términos de cómo han evolucionado los debates al respecto. Por razones de espacio en esta columna trataré los primeros dos temas y dejaré los últimos dos para la semana que entra.
(1) Lento crecimiento global. En cuanto al primer tema, quiero destacar que todavía existe mucha preocupación por que no se han podido alcanzar las tasas de crecimiento que se observaban antes de la “Gran Crisis” de 2008-2009. En este sentido, el menor crecimiento global se atribuye a tres asuntos: (a) El crecimiento del crédito es mucho menor que antes, en parte por el ciclo de desapalancamiento que han experimentado empresas, individuos y en algunos casos, hasta gobiernos, pero también por la pletórica nueva regulación financiera que se ha impuesto; (b) situación demográfica en los países desarrollados, donde gran parte de la fuerza laboral con elevado poder de compra se ha retirado y ahora vive con sus ahorros; y en menor medida (c) deficiencias en la medición de la actividad económica, en donde hay un profundo debate sobre las ganancias de productividad de la tecnología y si éstas están siendo tomadas en cuenta dentro de la contabilidad nacional. En cuanto al lento crecimiento de EU, particularmente en el primer trimestre del año, adicional a las consideraciones de largo plazo, se discutieron cuatro causas, una estructural y tres transitorias: Por el lado estructural (a) Menor inversión de las empresas que extraen petróleo y gas, particularmente las que lo llevan a cabo en los pozos de lutitas (shale); por el lado transitorio (b) clima extremadamente frío en dicho periodo; (c) huelga de los trabajadores portuarios en la costa oeste de EU; y (d) ajuste estacional deficiente que subestimó el crecimiento de 1T15.
(2) Divergencias de política monetaria. A pesar de que las bajas tasas de crecimiento se han observado a nivel generalizado, existen países en donde se está creciendo a un ritmo más lento que otros. Este es el caso de la Eurozona –que entró en crisis después de EU y adicionalmente las autoridades se tardaron mucho tiempo en instrumentar medidas de política económica eficaces-, y Japón, en donde llevan ya casi dos décadas tratando de erradicar la deflación. En este sentido se explica muy bien por qué existen divergencias en política económica, particularmente del lado monetario, contrastando con las preocupaciones que se expresaron por este tema en las discusiones que se llevaron a cabo en el Foro Económico Mundial (WEF) en Davos a inicios de este año. En este sentido, el debate se concentró en el momento y la forma en que el Fed llevará a cabo su proceso de normalización de tasas de interés.
Twitter: @G_Casillas
*Economista en Jefe. Grupo Financiero Banorte. Las opiniones que se expresan en el artículo no necesariamente coinciden con las del Grupo Financiero Banorte, por lo que son responsabilidad absoluta del autor.