El reconocimiento no había sido entregado a los soldados, uno judío y el otro afroestadunidense, a causa de la discriminación de aquel tiempo.
El presidente Barack Obama impuso la Medalla de Honor a dos veteranos del Ejército de la Primera Guerra Mundial a quienes pudieron no habérselas otorgado en el pasado a causa de discriminación. «Nunca es tarde para decir gracias», afirmó el mandatario.
El presidente reconoció póstumamente al sargento William Shemin, un militar judío, y al soldado Henry Johnson, afroestadunidense, por su heroísmo al rescatar camaradas en los campos de batalla de Francia hace casi un siglo.
La dos hijas de Shemin, Elsie e Ina, recibieron el reconocimiento en nombre de su padre. El comandante de la Guardia Nacional, sargento mayor Louis Wilson, aceptó la medalla en nombre de Johnson.
Fuente: Excélsior