Los principales sindicatos opositores exigieron mejoras salariales y una rebaja en el impuesto que grava los sueldos.
Los principales sindicatos opositores de Argentina realizaron una huelga general para exigir mejoras salariales y una rebaja en el impuesto que grava los sueldos, en medio de una economía que se encuentra estancada cuatro meses antes de las elecciones presidenciales.
La medida de fuerza, la segunda desde marzo, afectaba principalmente al transporte público de pasajeros y de cargas, al transporte aéreo, hospitales, gasolineras y puertos.
Los organizadores dicen que la huelga es principalmente para exigir al Gobierno que alivie la presión impositiva ante la caída del poder adquisitivo como resultado de una inflación galopante. También se reclama aumento salarial y que las negociaciones por estos incrementos no tengan techo.
La huelga, que se da en medio de negociaciones salariales entre sindicatos y empresas, fue convocada inicialmente por los gremios del transporte, pero luego se adhirieron las poderosas centrales sindicales opositoras.
Fuente: Excélsior