GABRIEL CASILLAS* | Perspectiva Global
La crisis económico-financiera en la República Helénica, mejor conocida como Grecia, se agravó el fin de semana pasado. El viernes pasado el Primer Ministro Tsipras propuso llevar a cabo un referéndum el próximo domingo 5 de julio para ver si la población acepta «acatar las políticas» que recomienda la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) para poder tener acceso a un programa de apoyo económico, particularmente con su deuda gubernamental. Por si fuera poco, el sábado pasado el Eurogrupo decidió no extender el programa de apoyo económico más allá del 30 de junio (i.e. no tendrán más préstamos para hacer frente al cumplimiento de sus deudas). Por último, el Banco Central Europeo (ECB) decidió el domingo –en reunión de emergencia-, no aumentar el nivel de liquidez que otorga a los bancos griegos, en donde una gran cantidad de clientes ha estado vaciando sus cuentas. Por ello, el gobierno ya dictó un feriado bancario que durará toda la semana y se impondrán controles de capital, en donde los cuentahabientes podrán retirar de sus cuentas hasta 60 euros diarios. En este sentido, quisiera dar respuesta a dos preguntas: (1) ¿Qué ocurrirá hacia delante con Grecia?; y (2) ¿Por qué afecta a México?
(1) ¿Qué ocurrirá hacia delante con Grecia? Yo considero que no van a salir de la unión monetaria. Pero el camino para reafirmar su estancia va a ser muy complejo. ¿A qué me refiero? A que no se puede “expulsar” a Grecia de la UME, deben ser los mismos griegos quien soliciten su retiro. En este sentido, los griegos han expresado que desean continuar en la UME, juzgando por el resultado de las encuestas que varias empresas han levantado entre la ciudadanía griega en los últimos meses. No obstante lo anterior, Grecia necesita los programas de ayuda económica y por más que lleva a cabo esfuerzos por reducir la deuda gubernamental, éstos no son suficientes y peor aún, hacen que el PIB no crezca, por lo que el cociente entre deuda y PIB no disminuye mucho en el tiempo. Cabe señalar que a pesar de que la troika ya les ha autorizado un monto alto de crédito, ellos van dividiendo la ministración de este crédito en parcialidades dependiendo de los avances que logran en términos de reformas estructurales y salud fiscal. Es por esto que ahora que ganó la mayoría del Parlamento en las elecciones pasadas el partido radical Syriza, bajo el estandarte de revertir medidas tomadas con anterioridad para mejorar las finanzas públicas, la troika no desea continuar brindando estas parcialidades y el gobierno griego no tuvo liquidez suficiente para pagar hoy un vencimiento importante de su crédito con el FMI y si no se resuelve este problema de aquí al 20 de julio, enfrentará una moratoria mucho más perjudicial. Esto se debe a que una moratoria al FMI puede no ser considerada un “evento de crédito” en donde se tendrían que cobrar los seguros por moratoria (CDS’), etc. Sin embargo, incumplir en tiempo y forma al ECB y a otros inversionistas el 20 de julio sí sería considerado un “evento de riesgo” y esto puede detonar otro tipo de crisis mayor. En mi opinión, la troika está permitiendo que la población griega “sufra un poco” para que acepten las medidas que tienen que instrumentar y con ello accedan al paquete de ayuda. Asimismo, terminan “doblando las manos” ante los griegos, pero no tan fácilmente como para que otros países con problemas como España o Portugal quieran demandar un trato similar de parte de la troika.
(2) ¿Por qué afecta a México? La relación comercial entre México y Grecia es muy poco significativa. Con datos del Banco de México, el año pasado sólo exportamos alrededor de 30 millones de dólares (mdd), que equivalen a 0.15 por ciento de las exportaciones de México a la Eurozona y sólo 0.008 por ciento de las exportaciones totales. Por otro lado, en el 2014 importamos de Grecia ligeramente más de 200 mdd, que representa poco menos de 0.5 por ciento de las importaciones provenientes de la Eurozona y sólo 0.05 por ciento de todo los bienes que importamos. Entonces, si la relación comercial entre México y Grecia es tan insignificante, por qué afecta las variables financieras en México como la bolsa –que ayer cayó 1.9 por ciento-, o el tipo de cambio, que sufrió una depreciación de 0.6 por ciento. En mi opinión, esto se debe a que en casos de mayor riesgo a nivel global, los administradores de grandes portafolios de inversión deciden reducir su tenencia de activos de riesgo en general. En este sentido, siendo el peso mexicano la divisa emergente más operada en el mercado global, goza de gran liquidez (i.e. diferencial reducido entre compra y venta, claramente no al menudeo) y eso provoca que disminuir posición en pesos mexicanos sea “más barato” con relación a otros activos de riesgo. Es por ello que el peso mexicano absorbe una gran cantidad de volatilidad en estos casos de aumento de riesgo global.
Twitter: @G_Casillas
*Economista en Jefe. Grupo Financiero Banorte. Las opiniones que se expresan en el artículo no necesariamente coinciden con las del Grupo Financiero Banorte, por lo que son responsabilidad absoluta del autor.