Tras destruir una decena de casillas sin oposición alguna por parte de las fuerzas de seguridad estatales y federales, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación organizó una enorme fogata en el zócalo de la ciudad, a la que fueron lanzadas boletas, urnas y otra papelería electoral.
La embestida del bloque oscuro de la sección 22 -un grupo de hombres encapuchados que se traslada en camionetas-, duró aproximadamente dos horas, tiempo que usaron para aterrorizar a funcionarios de casillas y votantes en distintos puntos del primer cuadro de la ciudad.
En la casilla 555, embistieron con una camioneta en contra del portón de la casa particular en la que se hallaba el centro de votación «¿Dónde está la policía? Vinieron y se llevaron todo», dijo Francisco Vázquez, presidente de casilla. En la casilla 571, ubicada en una escuela, los funcionarios electorales se resguardaron en los baños. «Comenzaron a golpear a unos muchachos que iban a votar», relató Leticia Robles Fuentes, presidenta de esa casilla.
La CNTE se replegó a su plantón en el Centro Histórico en donde este momento se encuentran rodeados a la distancia por fuerzas federales. Hacia las 13:00 horas un largo convoy de policías antimotines tomó posiciones cerca del primer cuadro, en donde sobrevuelan en estos momentos helicópteros del Ejército y Marina.
Gendarmería detiene a 88 maestros
Elementos de la Gendarmería y de la Policía estatal de Oaxaca detuvieron a un grupo de 88 integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación que habían robado y quemado material electoral en 14 centros de votación de la ciudad de Oaxaca.
La Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca informó que los implicados habían escapado en un autobús robado, con número económico A-073, de la empresa Choferes del Sur.
Los maestros mostraron resistencia pero fueron contenidos por el contingente de 100 elementos de la Gendarmería en las inmediaciones del municipio de San Jacinto Amilpas.
La Secretaría de Seguridad Pública del estado informó que 70 fueron detenidos en Oaxaca; en San Juan Bautistas Tuxtepe, 11, y en Puerto Escondido siete.
Fuente: Milenio