Luego de que las dirigencias nacional y estatal del tricolor dieron a conocer este domingo una presunta red de corrupción de Aureoles para beneficiar a empresarios constructores con recursos públicos federales gestionados desde la Cámara de Diputados, el líder perredista consideró que sólo buscan desviar la atención de las demandas que pesan sobre el candidato tricolor, Ascensión Orihuela, de tráfico de influencias, vínculos con el crimen organizado, enriquecimiento ilícito, despojo de tierras e incluso robo de autos.
«Son cuentos chinos y evidentes gritos de desesperación de la campaña de Orihuela, la cual está naufragando en Michoacán», aseguró.
El dirigente del sol azteca criticó al senador y dirigente del tricolor en esa entidad, Agustín Trujillo, después de que éste expusiera la supuesta red de corrupción de Aureoles.
Aseguró que el legislador rayaba en el cinismo toda vez que sus acusaciones se basaron en supuestos, y que incluso se negó a otorgar pruebas de sus señalamientos a los periodistas.
«Si el PRI michoacano quiere prueba, allí están todos los elementos ya corroborados de la forma en que este partido instauró un narcogobierno en Michoacán, ya que tienen a un ex Gobernador en la cárcel por colusión con La Tuta.
«La entrega del aparato de seguridad y de inteligencia a la delincuencia organizada; el desvío de recursos y la malversación del erario. Ellos están grabados haciendo pactos con La Tuta, acordando hasta las herencias de los familiares de Orihuela», añadió.
Fuente: El Universal