La cálida mañana del lunes 23 de Junio de 1812 “LA GRANDE ARMEE” el más poderoso y numeroso ejército que había visto Europa (casi 700 mil hombres y unos 300 mil caballos) cruzó el Río NIEMEN dando inicio a la invasión Napoleónica a Rusia, el último obstáculo en la carrera del “CORSO” por adueñarse de todo el continente.
Si bien el ataque no sorprendió a los rusos, si los tomó “mal parados” sus fuerzas apenas sumaban la tercera parte de las invasoras, que penetraron rauda y avasalladoramente; vanos fueron los intentos del ejército del Zar de contener o por lo menos retrasar la marcha sobre Moscú.
Pese a que los rusos habían incrementado sus efectivos, los generales zaristas se negaron sistemáticamente a presentar un combate frontal a las fuerzas Napoleónicas y no fue sino hasta Septiembre que ocurrió la única gran batalla en el camino de NAPOLEÓN a Moscú, en BORODINO.
La victoria dejó el campo libre hacia Moscú, que NAPOLEÓN tomó el 14 de Septiembre, sólo para encontrar ruinas quemadas: la urbe había sido saqueada y arrasada por los propios rusos para negar alimento y cobijo a los invasores ante la llegada del invierno.
NAPOLEÓN y sus huestes abandonaron en Octubre la ciudad y comenzaron una penosa marcha de regreso: aquejados por un inclemente frío, falta de avituallamiento, enfermedades y fatiga, la orgullosa tropa invasora fue mermando rápidamente, oportunidad que aprovecharon los rusos para atacarlos en estrategia de guerra de guerrillas.
Una fría tarde de Domingo 13 de Diciembre los restos de la “GRANDE ARMEE” cruzó de regreso el Río NIEMEN: habían terminado 25 semanas de pesadilla (Narradas musicalmente de manera magistral por TCHAIKOVSKY, pero eso será tema de otro “PRIMERO Y DIEZ”), el costo de la aventura fue alto: sólo sobrevivió una cuarta parte de su ejército, su Caballería prácticamente aniquilada por la pérdida de más de 200 mil caballos, mil cañones invasores quedaron en Rusia; fue el principio del fin para NAPOLEÓN, que sería derrotado definitivamente 16 meses después.
Quien tiene frente a sí también 25 semanas de pesadilla, es ni más ni menos que los STEELERS de Pittsburgh, mirando su calendario (el más largo y complicado de la NFL) recuerdo a NAPOLEÓN: comienzan en Agosto contra VIKINGOS en el Juego del Salón de la Fama”, ¡vámos! incluso los juegos de pretemporada contra BUFFALO y GREEN BAY, lucen complicados.
Su calendario oficial arranca con una visita a PATRIOTAS, que tal vez no cuenten con BRADY pero han demostrado que saben ganar sin él; 49’S es una incógnita, pero después les aguardan 4 durísimos juegos, dos en gira, contra RAMS y CHARGERS, y recibiendo en casa a CUERVOS y CARDENALES.
¿Pesado?, que pensaría si le digo que después le toca con KANSSAS y CINCINNATI. Recibe a OAKLAND, equipo eternamente en reconstrucción pero que finalmente parece levantar; y de ahí la pesadilla se incrementa con BROWS, SEATTLE, COLTS, BENGALIES nuevamente y esta vez en casa de ellos, más DENVER. Cierran sus últimos dos paridos (dónde muchas veces se gana o se pierde jugar en postemporada) con una gira aterradora: en BALTIMORE y CLEVELAND.
Los STEELERS tienen en su Roaster de juegos al Campeón y al Subcampeón de la NFL, se mide también a los otros 4 mejores de la CONFERENCIA AMERICANA del años pasado, 2 de ellos 2 veces BALTIMORE y CINCCY, y en la NACIONAL dos contendientes este año ARIZONA y SAN LUIS, ni siquiera los sencillos lucen fáciles.
Si PITTSBURGH quiere levantar el LOMBARDI en Febrero de 2016, deberá jugar y ganar en: ¡25 semanas de pesadilla!.
Si lo consigue, se consolidará como la franquicia más ganadora de la NFL, reverdecerá laureles, que tanta falta le hace y ROETHILSBERGER sellará su ingreso al HOF.
Si no lo logra, habrá que recordarlos como hoy nos acordamos de la poderosa y trágica “GRANDE ARMEE”.