La Comisión Especial del PRD que analiza la postulación de José Luis Abarca como candidato a alcalde de Iguala concluyó su informe y lo envió al líder nacional perredista, Carlos Navarrete, y al presidente del Consejo Nacional, Ángel Clemente Ávila.

En el informe se incluyen las declaraciones del exalcalde, quien actualmente se encuentra preso.

José Luis Abarca afirma que estaba en su casa la noche del 26 de septiembre de 2014, fecha en la que desaparecieron los 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero.

Abarca afirma que a las 23:30 le pidió a Felipe Flores (entonces jefe de la policía municipal) que llamara al Ejército y lo mismo le pidió al secretario de Gobierno del estado. Dice también que intentó llamar a la Policía Federal sin ningún éxito», dicta el informe.

El exalcalde de Iguala asegura que cerca de las 23:30 horas, cuando los jóvenes eran atacados con armas de fuego, él trató de comunicarse con el Ejército y con la Policía Federal, pero no obtuvo respuesta.

En su informe, los integrantes de la Comisión Especial acusaron al PRD de no implementar una «conducción del proceso político sobre la tragedia de Iguala, pues no ha tomado resoluciones, no ha dado directrices para encarar su responsabilidad política».

En el informe, también se detalla que José Luis Abarca permaneció en su casa mientras sucedían los hechos con los normalistas y los policías, además, indica que él no dio la orden de detener a los estudiantes.

Abarca, según afirmó ante esta Comisión, permaneció en su casa sin dar órdenes a la policía y con la idea de que él no podía hacer nada frente a lo que estaba ocurriendo pues no era quien contaba con las armas para ello”, señala el informe.

La comisión afirma que el exalcalde de Iguala se negó a responder sobre que los disparos provenían de los policías que estaban a su cargo.

El informe añade que como presunto integrante de Guerrero Unidos tendría responsabilidad, pero también lo tendía como autoridad.

Fuente: Excélsior

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