En el País, los peritos de la Procuraduría General de la República (PGR) sólo logran identificar a uno de cada cinco cuerpos hallados en fosas clandestinas.
De febrero de 2007 a diciembre pasado, la Procuraduría ha participado en el hallazgo de 161 entierros ilegales en 16 entidades.
En estos se exhumaron 581 cuerpos, de los cuales sólo 117 fueron identificados, lo que corresponde al 20.1 por ciento, según datos de la propia PGR obtenidos vía Transparencia.
«Se debe precisar que dicha información representa únicamente la participación del personal pericial del área, siendo que no en la totalidad de asuntos relacionados con fosas clandestinas en la República Mexicana, intervienen peritos de esta Procuraduría», aclara la dependencia en su respuesta a la petición de información.
En lo que respecta a los dos primeros meses de este año, la PGR participó en labores relacionadas con 13 entierros clandestinos, todos en Iguala, Guerrero, en los que fueron encontrados 20 osamentas aún en proceso de identificación.
De hecho, entre 2007 y 2014, Guerrero fue el Estado en el que la Procuraduría tuvo mayor participación, pues trabajó en 66 fosas con 179 cuerpos, 67 de los cuales fueron exhumados en Iguala tras la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, registrada el 26 de septiembre del año pasado.
De esas 67 osamentas, sólo 16 han sido reconocidas, de acuerdo con el reporte. En 2011, la PGR participó en la identificación de 120 cuerpos en San Fernando, Tamaulipas, cuando Los Zetas masacraron a migrantes indocumentados.
Según la respuesta de la Procuraduría, en ese caso, fueron reconocidos 66 cuerpos.
Entre noviembre de 2013 y enero de 2014, la dependencia laboró en 37 fosas con 75 osamentas en el Municipio de La Barca, Jalisco, donde identificó a 17 personas.
En tanto, en el DF, entre diciembre de 2008 y febrero de 2014, se han hallado cuatro entierros clandestinos con igual número de cuerpos, los cuales ya fueron identificados.
Todos los casos se registraron en la Delegación Tlalpan. En específico, dos de las fosas fueron localizadas en el Ajusco en junio de 2013.
Además de las entidades mencionadas, se han encontrado entierros clandestinos en Aguascalientes, Chihuahua, Chiapas, Durango, el Estado de México, Hidalgo, Michoacán, Morelos, Nuevo León, Oaxaca, Sonora y Veracruz.
Fuente: Reforma